Cuando el mundo empieza a molestarme
no grito y desespero porque el mundo
no es la gente que exaspera, los olores
que transpira no es la gente ni los autos
los que chocan matan tocan la bocina
como si eso los hiciera mas felices.
El mundo soy yo.
Cuando grito y algo empieza a molestarme
no es el mundo ni la gente ni las ganas
de tirarme a descansar las que me chocan,
son los autos las mentiras las bocinas
que revientan mis oidos mis mañanas
lejos de la selva porque en mi ciudad
nunca hubo selva ni desierto ni avellanas,
solo una vereda.
Pero hay veredas como selvas,
donde los leones son gatos
y los gatos mujeres con tacoalto,
los arboles son altos y verdes
y cuando uno pasa piensa en una rosa
o en una mujer desnuda,
pero solo hay dos.
Entonces los arboles sonrien,
porque la gente los adula,
los llama pino murciegalo abedul
y ellos no creen en todo eso,
pero sonrien, porque saben que a pesar
de las palabras,
son unicos.
Cuando empieza el mundo a molestarme
no me caliento y reboleo
puteadas por doquier,
busco concentrarme en lo que soy
árbol.
no grito y desespero porque el mundo
no es la gente que exaspera, los olores
que transpira no es la gente ni los autos
los que chocan matan tocan la bocina
como si eso los hiciera mas felices.
El mundo soy yo.
Cuando grito y algo empieza a molestarme
no es el mundo ni la gente ni las ganas
de tirarme a descansar las que me chocan,
son los autos las mentiras las bocinas
que revientan mis oidos mis mañanas
lejos de la selva porque en mi ciudad
nunca hubo selva ni desierto ni avellanas,
solo una vereda.
Pero hay veredas como selvas,
donde los leones son gatos
y los gatos mujeres con tacoalto,
los arboles son altos y verdes
y cuando uno pasa piensa en una rosa
o en una mujer desnuda,
pero solo hay dos.
Entonces los arboles sonrien,
porque la gente los adula,
los llama pino murciegalo abedul
y ellos no creen en todo eso,
pero sonrien, porque saben que a pesar
de las palabras,
son unicos.
Cuando empieza el mundo a molestarme
no me caliento y reboleo
puteadas por doquier,
busco concentrarme en lo que soy
árbol.